Resumen:
"Las alegrías de los iluminados trascienden con mucho el estremecimiento de los sentidos glorificados. La contemplación de la belleza celestial y la verdad celeste van mucho más allá que nuestros estándares terrenos de comparación. La claridad instantánea de todo proceso mental, la completa exclusión de error, la inquebrantable serenidad de la visión, la facilidad de abrazar mundos enteros y sistemas en calma, buscando, con una sola mirada el carácter divino y la santidad de todas las verdades presentadas ante la vista,...son palabras rotas que sirven al menos para mostrar que podemos desde ahora intuir acerca de la eterna bienaventuranza..."